¡Mirada Ecológica desde la Serranía del
Turimiquire!
En el año 1995 llegaron un grupo de personas
al Liceo "Raimundo Martínez Centeno", solicitando
a varios estudiantes cursante del cuarto año (4to) y quinto año (5to), para que participaran en
una Brigada Ecológica del Municipio Ribero. Los integrantes serian juramentados
en la Serranía del Turimiquire; la mayoría se anotó para participar, ahí estaba
yo, lo pensé mucho y tardé en aceptar ya que tenía un padre con un carácter muy
fuerte que no me dejaba salir fácilmente; después de pensarlo muy bien me
inscribí, consciente de que ahora el problema que tenía era pedirle permiso a
mi papá. Pasaron los días, caminaba por toda la casa, me paraba, veía a mi
padre leyendo sus revistas de vaquero en el patio de la casa (risas de nervios) y me costaba acercarme
para solicitar su permiso y/o aprobación. El tiempo pasaba, debía hablar con él
porque ya faltaban pocos días para ir a esa actividad que quería realizar ya
que era algo que me atraía.
Un día me armé de valentía y sin dudarlo más me
acerqué a mi padre y le expliqué lo de la actividad que era en Cumanacoa y que
asistiría todo el salón de clase, también le manifieste que esta actividad era evaluada
(es decir, que tenía la famosa nota); mi papá lo entendió, confió en mí y me
dio el permiso, Yo ¡gritaba de alegría!, mis hermanos le decían: “que suerte
tienes tu muchacha, ni a los mayores las dejan salir, tu eres afortunada”…
Llego el gran día donde debíamos encontrarnos
todas las estudiantes y todos los estudiantes frente al Liceo Raimundo Martínez
Centeno donde nos esperaba un autobús, el cual nos llevaría a vivir una
experiencia maravillosa. De Cariaco a Cumana, aproximadamente a hora y media de
camino, al llegar recorrimos desde allí quince (15) minutos más hacia Cumanacoa,
el camino no era fácil, habían muchas curvas y la carretera era de tierra, lo
que no esperaba que ese camino tan desolado ocultaba un paraíso detrás de él. El
Gran Turimiquire, cuya palabra en lengua Cumanagota significa "Trono de los Dioses",
comprende un inmenso sistema de serranías que se prolongan en los estados
orientales venezolanos, específicamente los estados Sucre, Anzoátegui y Monagas. La verdad, fue una impactante experiencia que mis ojos no lo podían
creer de lo inmenso y maravilloso del paisaje que estaba observando, era algo
nunca visto, era espectacular, la profundidad de la Serranía, era un ambiente
mágico, nos llevaron en lanchas rápidas de la Guardia Nacional, yo jugaba con el agua aunque estaba asustada, pues era la
primera vez que me montaba en una lancha, disfruté el paseo y la experiencia ,
conocimos a algunos habitantes de la zonas, eran personas muy humildes pero con
un gran corazón. En el lugar logramos observar una gran cantidad de orquídeas y
helechos de todo tipo. Nos dieron a comer caña de azúcar, pudimos ver como
elaboraban el casabe y nos dieron a probarlo, así, recién hecho.
Lo que nunca imagine era que cerca de mi
pueblo estaba algo tan maravilloso como el Turimiquire. Una de las cosas más
importantes que nos comentaron los habitantes fue que la represa del río Turimiquire, fue creada para llevar agua a la Isla de Margarita
(estado Nueva Esparta) y toda la región nororiental.
Terminado el recorrido nos dieron un almuerzo que fue muy sabroso ya que
era pescado (me gusta mucho) y con el casabe recién bajado del budare, los
platos eran hojas de cambur, a las 4:00 p.m. llegó el Gobernador del estado
para ese momento, quien nos juramentó y allí empezamos a sembrar los mil (1000)
pinos; a las 6:00 p.m. tuvimos que movilizarnos de esta hermosa vista que por siempre la llevo en mi mente y
mi corazón, estaba lloviendo muy fuerte, el bus se detuvo en Cumana ya que el
camino no se veía bien, llegamos a mi pueblito: Cariaco, a las 8:30 p.m., no pude
llegar a mi casa porque era demasiado tarde, por tal motivo me quede en casa de
mi abuela...
Después de 24 años de esta
experiencia me motive a escribirla ya que mi asesor, quien ha sido una persona
muy motivadora, que aprovecho para agradecerle a Dios por conocerlo, él no es
otro que mi maestro, el maestro de maestros, el Profesor Jean Carlos Dubén, y
producto de esa palabras con las que él inspira a las personas pude escribir este
pequeño relato que a pesar de han pasado
más de 20 años, aun lo recuerdo como si fue ayer, es que este tipo de
experiencias son imposibles de olvidar, te marcan para siempre y por si fuera
poco la vida me puso en el camino laboral una escuela con principios Ecologistas
y Socialistas como lo es la Unidad Educativa Nacional Ecosocialista “Arañero de
Sabaneta” en el Circuito Educativo Fuerte Tiuna, Distrito Capital, donde soy Maestra con funciones de Subdirectora. Espero les guste
este relato y Gracias al Profe Dubén.
Gracias profe por ayudarme a lograr escribir esta experiencia me siento alegre y complacida Dios me lo bendiga grandemente .
ResponderBorrarMe encantó el relato. Pude imaginarme ese hermoso lugar. Y quedé con ganas de conocerlo... Felicidades Profesora!!!
ResponderBorrarMe encantó tu escrito Nore! El evidencia tu amor por la naturaleza, por la buena comida (jeje) y tu compromiso como docente. Gracias colega y amiga!
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