Para lograr sinergia,
coherencia y cohesión es necesario el trabajo en equipo, lo colectivo como
principio metodológico y la complementariedad como método.
Trabajar en equipo no
es fácil y mucho menos cuando la cultura heredada es competir. Si la llave
compitiera con la cerradura para ver cuál es mejor, jamás se pudieran abrir
puertas. Para complementarse unos y unas con otros y otras es necesario no
competir, lejos de ser contrincantes, necesitamos ser complementarios y
complementarias.
La complementariedad en
el trabajo en equipo es posible si hay respeto y reconocimiento de las
fortalezas y limitaciones de cada quien, la fortaleza de una persona
complementa la debilidad de otra, por eso no es posible comparar, ni emular,
sino VALORAR los diversos esfuerzos
compartidos. Lo importante es que todo el mundo empuje para la misma dirección,
cada uno y cada una con sus capacidades y en el esfuerzo compartido, se
aprenden nuevas capacidades.
No escribo por
escribir, vienen nuevos momentos y ameritan de nuevas lógicas y nuevos métodos.
Seguir empecinados y empecinadas en repetir lo que genera dispersión, dilución
de esfuerzos y resultados mediocres es, en palabras rodrigueanas, errar. ¡Besotes!
Yoama Paredes
Maestra Ambulante
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